Towards Democracy. Edward Carpenter

200px-day_fred_holland_1864-1933_-_edward_carpenterNo encuentro en español este libro. Dejo unos versos sobre la libertad que parecen interesantes. Buscamos de verdad sólo lo que no sabemos qué es. Todo aquello a lo que podamos dar significado, un significado que nos vale, dejamos de buscarlo.

And so I heard a voice say What is
Freedom?
I have heard (it said) the lions
roaring in their dens; I have seen
the polyp stretching its arms up-
ward from the floor of the deep;
I have heard the cries of slaves and the rattling of their chains,
and the hoarse shout of victims rising against their oppresors;
I have seen the delivers dying calmly on the scaffold.
I have heard of the centurieslong struggle of nations for constitutional liberty_the step-by-step slowly-won approaches as to some inner and ampregnable fastness…
But what is freedom?

Y oí una voz diciendo, ¿qué es la libertad?
He oído, decía, a los leones rugiendo en sus guaridas; he visto al pólipo estirar sus brazos hacia arriba desde lo más profundo;
He oído los gritos de esclavos y el movimiento de sus cadenas y el ronco grito de las víctimas levantándose frente al opresor; he visto a los liberadores muriendo serenos en el patíbulo;
he oído algo sobre las luchas centenarias de las naciones por conseguir la libertad constitucional_ los lentos logros- paso a paso hacia una íntima e impenetrable solidez…
Pero, ¿qué es la libertad?

Edward Carpenter

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3 responses to “Towards Democracy. Edward Carpenter

  1. Según hacia donde mires la libertad es una u otra cosa. Es cierto que buscamos, como muy bien nos dices, lo que no sabemos qué es, y cuando lo sabemos la búsqueda pierde aliciente y hasta deja de tener sentido.

    La libertad, en su concepción mas primitiva, debe tener que ver con no tener ataduras, y no tener ataduras es justo lo contrario a lo que estamos destinados los humanos desde el mismo momento de la concepción, en que estamos sujetos al cordón que nos nutre hasta el alumbramiento. Y no existen ataduras más o menos grandes, porque como explica el poeta ¿qué importa que un pajarillo esté encadenado o tenga en su pata un fino hilo si, al fin, no puede volar?

    La libertad solo puede nacer buscando en nuestro interior, y abandonando todo lo que nos limita; todo, hasta terminar por abandonar nuestro propio cuerpo… aunque por ello mismo, cuando lo queramos entender ya será demasiado tarde.

  2. La libertad, es como por así decirlo, tener el sentimiento de que vas en la buena dirección, de que si tienes que pensarla no es algo inalcanzable y etéreo, sino algo tangible y verdadero. La libertad es abrir tu corazón, como si de un ojo interno se tratase, y ver la luz.

    La libertad en fín, amigo Silvestre, es un abrazo que sabes que te condena a la dependencia y, sin embargo, lo haces en una entrega definitiva.

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