VIAJE POR MAR CON DON QUIJOTE. Una lectura de Thomas Mann.

images-21
THOMAS MANN
TRADUCCIÓN: GENOVEVA DIETERICH
EDITORIAL R QUE R

MEERFAHRT MIT DON QUIJOTE/ THOMAS MANN/ FISCHER

Del 19 de mayo al 29 de mayo de 1934 Thomas Mann escribe un diario de a bordo en el barco que le lleva por primera vez a Estados Unidos. Se ha propuesto leer en ese viaje el Quijote traducido maravillosamente por Tieck, gran poeta alemán.

El pequeño libro, tiene107 páginas con muchas fotos, resulta interesante por varias razones: la lectura del quijote por un gran autor y extranjero; la descripción del momento inmediatamente anterior a la destrucción de Europa y la postura de un autor que se autoexilia de Alemania en la guerra. Estos tres puntos resultan muy curiosos.

Empezamos por el autor. La pérdida de valores la ve como el problema fundamental en ese momento, al igual que muchos filósofos alemanes de entonces. Cree que uno no debe dejarse llevar por las locuras de una época, que debe mantenerse en los valores, lo dice con tranquilidad, en ningún momento da la sensación de que crea que pocos años más tarde estallará una guerra. Y mientras el mundo se hunde, o prepara su fin, el barco de lujo flota sobre el mar a veces violeta, y él y su mujer cenan con el capitán, comparten mesa con correctas parejas de Philadelfia y se preparan para las cenas y cócteles con alemanes emigrados a Estados Unidos, cineastas y científicos como Einstein.

Y desde ese tempo andante que cree típico de lo alemán, se pone a leer el Quijote como un libro universal en un viaje universal. Considera a Cervantes un hombre libre, crítico y muy humano para su época.

Destaca el humor como una cualidad fundamental y también el que la novela tuviera como objetivo acabar con las novelas de caballería, que no fuera ambiciosa y terminara en esa espiritualidad.

Como crítico, una cualidad que no se resalta suficientemente en las lecturas españolas, Cervantes es excepcional, porque después de ridiculizar a los personajes que se enfrentan a Don Quijote, siente compasión por ellos. En realidad estaría describiendo el carácter intermedio de la humanidad, no somos dioses ni animales.

Otro tema que resalta es el de la dignidad, que tienen tanto que ver con la literatura, la búsqueda de dignificar al hombre que vive tantas indignidades.

En cada día del viaje hay una lectura de algún capítulo del libro que de verdad incita a la lectura.
Thomas Mann está conmovido por la humanidad de Cervantes y por su libertad al llegar a la solidaridad casi total del autor con su héroe, la tendencia a equiparar su nivel espiritual con el propio, a convertirlo en portavoz de las propias convicciones y opiniones.

También le parece increíble que en la segunda parte del libro se presenten los personajes como los auténticos D.Quijote y Sancho, como si entrasen definitivamente en el mundo, se personalizasen.

El final de este librito resulta muy plástico. Mientras Mann se embarga de dolor, amor y compasión en infinita devoción, ¡Una dirección de los sentimientosy pensamientos demasiado europea y demasiado vuelta hacia atrás!, aparecen los rascacielos de Manhattan, una ciudad fantástica, amontonada de gigantes.

La sensación del que haya leído La Montaña Mágica ante este espectáculo de corrección y distancia hacia el mundo es muy curiosa, porque en 1933 ya habían quemado los libros en Berlín, incluidos los de su hermano Heinrich. La explicación que se da es la de resistir a sus demonios, tendencia homosexual, con una vida ordenada de disciplina férrea. Desde luego, la sensación es de que algún día decidió dejar de sentir hasta el final y dar espacio a la libertad sólo en sus novelas.

Biografía de Thomas Mann

Resumen de este libro en lecturas cervantinas

Compartir:

3 responses to “VIAJE POR MAR CON DON QUIJOTE. Una lectura de Thomas Mann.

  1. Gracias por el comentario.
    La lectura yo la veo más como una forma de aprender a vivir mejor, pero siempre relacionada con el mundo y no con refugiarse de él. Entiendo que estamos acostumbrados a considerar la lectura como una forma de retirarse del mundo, pero tiene mucha más potencia si se hace desde la búsqueda, íntimamente ligada al cambio.

  2. Estupendo comentario, Silvia. Lo que más me gusta del mismo es el enfoque en Thomas Mann mientras escribía ese diario de abordo, y tu análisis de su situacion de exiliado, como Ricote en la Segunda parte de DQ.
    ¿Tendrías el texto escaneado en castellano? ¿O sabes dónde se consigue en pdf?
    Mil gracias.
    María Antonia Garcés

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *